Sony tiene ganas de decir cinco veces aquello de Candyman delante de un espejo, en un remake del terror claustrofóbico de la película de 1992 con ese nombre.
La original me gusto bastante por el ambiente angustioso, que no solo aportaba el encumbrado Tonny Todd como el ser de pesadilla, sino ese barrio de bloques de viviendas y sus habitaciones llenas de horribles graffitis sacados de las peores pesadillas.
La original me gusto bastante por el ambiente angustioso, que no solo aportaba el encumbrado Tonny Todd como el ser de pesadilla, sino ese barrio de bloques de viviendas y sus habitaciones llenas de horribles graffitis sacados de las peores pesadillas.